Nueve cosas que debilitan el sistema inmunitario

A la luz de la pandemia, la salud del sistema inmunitario ha pasado a ser una prioridad en la mente de todos. Todo el mundo quiere saber: “¿Cómo puedo mantener mi sistema inmunitario fuerte para que sea menos susceptible a las infecciones?”

Nuestro sistema inmunitario es un sistema antiguo y sorprendentemente complejo, diseñado para mantener nuestros cuerpos funcionando en todo momento y para hacer frente a los desafíos que plantean los invasores ajenos. Sin embargo, nuestro mundo moderno y cómodamente cargado ha presentado una serie de nuevos desafíos a nuestra principal línea de defensa.

Aquí hay nueve perturbadores de la inmunidad comunes. Mantenerse alejado de ellos puede ser un buen consejo. Esto garantiza que su sistema inmunitario tenga todos los recursos que necesita para protegerlo.

1. Estrés, ansiedad, pánico

Cuando estamos estresados, nuestros cuerpos dicen a nuestro sistema nervioso y a las hormonas del estrés que es hora de actuar. Nuestro hipotálamo dice a las glándulas suprarrenales que produzcan más hormonas, adrenalina y también cortisol, y las liberen al torrente sanguíneo. Los experimentos en los que se administra adrenalina por vía intravenosa muestran que reduce la cantidad de magnesio, así como de calcio, potasio y sodio. Esto demuestra que cuando está estresado y libera adrenalina, también está consumiendo magnesio.

2. Sueño insuficiente

Según la National Sleep Foundation, dormir más probablemente no le ayudará a evitar enfermedades, pero las horas perdidas de sueño pueden debilitar su sistema inmunitario y hacerlo más susceptible a las infecciones.

3. Crecimiento excesivo de levaduras de Cándida

El crecimiento excesivo de levaduras es una de las principales causas inmunosupresoras, ya que las levaduras producen 178 toxinas de levadura diferentes que deben eliminarse del cuerpo una vez liberadas. Todo el sistema mediante el cual el cuerpo excreta las toxinas de levadura consume nutrientes y quita energía a otras funciones del cuerpo, especialmente al sistema inmunitario.

Comience por eliminar los alimentos que alimentan las levaduras (p. ej., frutas con alto contenido de azúcar, azúcar, cereales que contienen gluten, cafeína).

4. Comida rápida y comida basura

Según una investigación realizada en Alemania, el sistema inmunitario reacciona a una dieta de comida rápida rica en grasas y calorías de forma similar a una infección bacteriana. Y esta hiperreactividad puede persistir mucho después de cambiar a una dieta saludable. Por tanto, cuanto antes se eliminen estos alimentos, mejor.

5. Alimentos que contienen GMS (glutamato monosódico)

Las investigaciones demuestran que comer alimentos que contienen GMS puede provocar cambios no deseados en el timo y el bazo, que son actores clave en la función inmunológica. (Tanto el timo como el bazo producen linfocitos que eliminan invasores extraños; su bazo también produce anticuerpos que ayudan a mantenerle saludable.)

6. Refrescos

Las sustancias químicas en los refrescos pueden afectar las bacterias intestinales. Esto es problemático porque existen muchas interacciones entre el sistema inmunitario del cuerpo y las bacterias del intestino.

Un estudio reciente que investigó los efectos de los refrescos en las bacterias intestinales encontró que consumirlos puede dañar el microbioma. El tracto digestivo e intestinal está lleno de bacterias buenas que mantienen el cuerpo sano.

7. Ingesta excesiva de cafeína

Cuando se consume con moderación, hasta 400 mg de cafeína (alrededor de 3 a 4 tazas de café preparado), puede tener algunos efectos positivos sobre la inflamación, y los antioxidantes del café pueden incluso ayudar a prevenir algunos cánceres, enfermedades cardíacas, diabetes, osteoporosis, y enfermedades neurológicas.

Sin embargo, demasiada cafeína puede reducir la capacidad de nuestro sistema inmunitario para combatir infecciones y eliminar células dañadas o anormales. Los estudios también muestran que las mujeres y los hombres que beben grandes cantidades de cafeína liberan niveles más altos de cortisol, la hormona del estrés, en respuesta al estrés físico y mental.

8. Fumar

Fumar suprime las células inmunes. El humo del cigarrillo contiene más de 4.000 toxinas, la mayoría de las cuales pueden irritar o matar las células del cuerpo. Fumar cambia una gran cantidad de diferentes células inmunes y perjudica el funcionamiento de otras. Incluso puede poner el sistema inmunitario en contra de las propias células del cuerpo.

Como resultado de estos cambios, los fumadores tienen más probabilidades de sufrir varios tipos de enfermedades infecciosas, incluidas infecciones respiratorias, gripe y enfermedades de las encías. Cuando los fumadores dejan de fumar, su inmunidad comienza a mejorar en 30 días.

9. Alcohol

Existen pruebas significativas de que el alcohol perjudica la función del sistema inmunitario. Estas alteraciones pueden afectar la capacidad del cuerpo para defenderse contra las infecciones.

El alcohol altera la cantidad y la abundancia relativa de microbios en el microbioma intestinal, que es la gran comunidad de microorganismos en el intestino que ayudan a su funcionamiento normal. Estos organismos influyen en la maduración y la función del sistema inmunitario. El alcohol altera la comunicación entre estos organismos y el sistema inmunitario intestinal.

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